4 de junio de 2012

Un amigo...


¿Amigos? Por desgracia en esta vida amigos suelen haber pocos, ya que conocidos hay muchos pero los verdaderos amigos se caracterizan por muchas cosas entre ellas:

Un amigo es una persona que pase lo que pase estará a nuestro lado. Que en todas y cada una de nuestras alegrías y momentos felices estarán ahí para disfrutarlos con nosotros, pero sobre todo estarán en cada momento triste para alegrarnos, en cada lagrima para consolarnos, en cada caída para levantarnos, al fin y al cabo, hará que cada momento duro de nuestra vida se convierta en una gran llanura al final de la cual se encuentra la meta, la felicidad, la cual disfrutara y gozara a nuestro lado porque al final él es el artífice de nuestras alegrías.

Un amigo tiene toda la confianza de este mundo, el cual posiblemente sepa cada uno de nuestros problemas, el motivo de nuestras alegrías, cada uno de nuestros ligues, parejas,…, cada una de nuestras vivencias pero sobre todo conoce cada momento, cada aventura que ha pasado junto a nosotros y que sabemos que no sería lo mismo si no fuera por él. Nadie mejor que él para darnos consejos ya que nos conocen como nadie.

Un amigo es como un hermano, que aunque tengamos nuestras peleas lo queremos como si fuera un hermano porque aunque por nuestros caracteres, nuestras formas de ser o los motivos que sean nos peleemos o tengamos nuestras discusiones, sabemos que pase lo que pase estará a nuestro lado, nos ayudara cuando sea necesario y nos defenderá como si de su propia vida se tratara.

Un amigo solo querrá nuestro bien, por eso nos dirá las cosas a la cara, aunque a veces no sean agradables de oír o no queremos oírlas porque quizás son palabras que hacen daño, pero si nos lo dicen será por algo y no nos lo dirá para hacer daño sino para que a lo mejor nos demos cuenta de algo que estamos haciendo mal y podamos rectificar porque nunca lo hará con ninguna maldad sino para ayudarnos. Un amigo no te regalara los oídos para hacernos sentir bien y ya está, porque eso no es un amigo, un amigo se enfadara (aunque no tenga que ver con él nuestro error), nos recriminara nuestro fallo pero también nos ayudara con sus consejos y nos defenderá pero no ocultaran que nos hemos equivocado, y esto lo hará para abrirnos los ojos y no vivir engañados por nuestros errores.

Por todo esto debemos valorar a nuestros amigos y hacerlo de la mejor manera que podemos que es ayudándoles cuando ellos lo necesiten, apoyarlos siempre, cuidar la relación de amistad, defenderlos con todas nuestras fuerzas y nunca traicionarles porque “amigos” podemos encontrar muchos pero AMIGOS muy pocos. Asi que, cuida a un amigo, respétalo y nunca traiciones su confianza porque son difíciles de encontrar y sobre todo de mantener.

23 de mayo de 2012

¿Perfección?…¡Imperfección!


Entiendo la perfección como algo abstracto, algo que no podemos determinar por una cantidad. Aunque quizás estaría bien ir a una tienda y pedir 1kg de perfección, pagarlo y de repente ser más perfectos, aunque yo preferiría la tienda de la imperfección, los motivos más adelante se entenderán.

Pero partiendo de la supuesta base de que pudiéramos comprar perfección, que se pudiera cuantificar, yo me pregunto ¿Quién mide esa cantidad? ¿Quién diría esto es 1kg de perfección? ¿Quién establecería esas normas? La respuesta es clara y obvia, NADIE. El porqué también es muy obvio, porque ¿Quién es perfecto? ¿Quién dice esto es perfecto? Nadie puede hacerlo, bueno siempre existen ilusos, por no decir otras palabras, que se definen como perfectos, que ellos son los más guapos, los más listos, los más… pero lo más lógico y real es que todo lo que tienen de más luego lo tienen de menos en muchos otros aspectos, y además esas personas ¿Cómo saben que su belleza (por ejemplo) es perfecta? Pues como es lógico no lo pueden saber porque lo que para uno puede ser perfecto para otro no, y ¿Quién tiene razón? Quizás ambos, porque la perfección la entiende y la define cada uno como quiere.

Además la perfección se entiende como algo insuperable, como algo que posee el grado máximo de una determinada cualidad o defecto. Pero, ¿Qué sería de la vida si todos fuéramos perfectos? Seriamos como robots producidos en serie, con algunos “fallitos” (aunque si tienen un solo “fallito” se supone que tampoco serian perfectos) que hacen que unos duren más que otros, pero todos con las mismas cualidades, con la misma esencia. Todos seriamos iguales, todo seria monotonía, seria todo aburrido, como si todo fuera de un mismo color…, ¿Dónde estaría la esencia de la vida misma? No tendríamos una de las cosas más bonitas que es conocer a gente de todo tipo, con diferentes pensamientos y deferentes maneras de ser, porque si fuéramos perfectos ¿De qué hablaríamos? ¿Qué haríamos? Porque todos reaccionaríamos igual y haríamos las mismas cosas… ¿Realmente valdría la pena vivir asi? Yo creo que no.

Hay gente que se empeña o intenta ser perfecta, pero aunque lo llegaran a ser, ¿Cómo sabrían que lo son? Porque como dije lo que para uno seria perfección para otro quizás no. Pero en eso consiste la esencia de la vida, en que no existe un modelo que defina la perfección, sino que cada uno es perfecto a su manera como una suma de imperfecciones que hacen que cada persona sea un mundo para explorar.  Y explorando encontrar las personas que nosotros consideremos como “perfectas” que aunque no lo sean como tales, tienen cualidades que otras personas no tienen y que hacen que para nosotros sean perfectas. Pero esto es asi gracias a la imperfección que hace que cada persona tenga su propia forma de ser. Esta imperfección es la que nos hace que cada día nos esforcemos en aprender de todo lo que nos rodea para asi mejorar tanto como personas como mejorar nuestras cualidades. La imperfección es lo que hace que cada persona tenga su propio encanto, su propia belleza, su propia personalidad. Como se dice para gustos colores, por eso la imperfección de cada persona puede ser la perfección para otra.

A mí personalmente me encanta ser imperfecto y aprender y explorar cada una de las imperfecciones de las otras personas, porque pienso que en la imperfección esta el encanto y la belleza de las cosas. Como se dice para gustos colores, por eso la imperfección de cada persona puede ser la perfección para otra.


Busca la perfección en la imperfección.                                    xDDDDDDDD

13 de mayo de 2012

Cuando...

… la tristeza siempre acaba dando motivos de felicidad J J J
  
Cuando la tristeza me abruma, mi mejor sonrisa sale a relucir porque pase lo que pase me gusta ser feliz, y sobre todo, hacer feliz a los demás.

Quizás no soy la persona más risueña del mundo, quizás no siempre tenga una sonrisa en la cara, quizás no siempre sea alegre, quizás… pero sí que estoy seguro que cuando alguien lo necesita sonrió, que cuando la tristeza me posee intento sonreír porque aunque yo siga triste, se que alguien lo agradecerá. Por eso pienso que pase lo que pase, y este uno como este, hay que sonreír porque sobretodo hay que ver felices a los que nos rodean y hacer lo que sea para que lo sean.

Cuando llueve en mis ojos, todo se vuelve gris y se detiene mi corazón pero cada lágrima que se cruza con mi sonrisa, crea un precioso arcoíris que llena de colores mi vida y crea una inolvidable ilusión, la felicidad.

Por muchos momentos amargos que tenga en la vida, por muchas lagrimas que nublen mi mirada, nunca dejare de sonreír porque siempre hay motivos para hacerlo. Esta vida debemos aprovechar cada momento que tenemos, siempre hay malos momentos, pero para algo existen para aprender de ellos, pero al final acaban triunfando los momentos maravillosos, siempre hay motivos para acabar sonriendo y convirtiendo toda nuestra tristeza en adorable felicidad porque el dolor es temporal pero la felicidad eterna!!

Cuando un barco zarpa pierdo un trocito de mí, de mi alma, de mi corazón, de mi vida pero con cada ola se refresca mi arena o devuelve mi perdida.

Cada momento que algo o alguien deja nuestras vidas, perdemos un trocito de nosotros. Unas veces por unas cosas y otras veces por otras, motivos pueden ser muchísimos pero la tristeza en nuestro interior es la misma porque al fin y al cabo sea por el motivo que sea perdemos una parte de nosotros. Aunque siempre queda consolarse con las reconciliaciones que hacen que cada pérdida sufrida pueda repararse y vuelva los buenos momentos. Otro motivo para consolar la perdida puede ser la llegada de nuevas personas o proyectos a nuestras vidas que refrescan nuestro cuerpo.

Cuando se esconde el sol y todo se vuelve negro, existen preciosas estrellas que iluminan mi camino hasta alcanzar mi destino, la luna llena, llena de paz, tranquilidad y felicidad.

La vida no es solo el día, lleno de luz y de colores, porque por desgracia no todo son buenos momentos, pero siempre que la luz desaparece existen preciosas personas, vivencias de la vida, etc… que crean un hermoso camino que nos permite tocar con los dedos la mayor meta de la vida, ser felices. Ya solo queda que mientras esas preciosas estrellas nos iluminan mientras tocamos la luna, se haga de día y cree un gran arcoíris alrededor de nuestro cuerpo atándonos a la pura y transparente felicidad.


10 de mayo de 2012

Una sonrisa siempre por delante

Esta vida está llena de todo tipo de momentos. Voy a diferenciarlos todos en solamente dos: los buenos y los malos. Sobre todo me centrare en estos últimos porque los buenos momentos todos sabemos sonreír, alegrarnos, disfrutarlos, aprovecharlos, en definitiva ser felices. Pero lo realmente difícil es hacer todas estas cosas tan maravillosas, como es simplemente sonreír, en los malos momentos.

Seguramente en esos malos momentos solo tenemos ganas de llorar, de estar tristes, de agachar la cabeza y mirar al suelo, no tenemos ganas de nada, solamente ganas de que pase el tiempo y así que nuestra cabeza olvide la causa de nuestra amargura y deje de pensar y darle vueltas, también conocido como “rayarse”. Son momentos en que quizás la soledad nos guste (mi primera entrada habla de ello). Son momentos algunos esperados u otros inesperados, dependiendo de las circunstancias, pero en casi todos aparecen preguntas como ¿Por qué? ¿Por qué a mí?¿Que he hecho para merecerlo? O un sinfín de preguntas, al igual que afirmaciones tales como “no veo el final de este túnel de oscuridad”, “no tengo fuerzas” y demás expresiones que nos vienen a la cabeza. Son momentos delicados en los que estamos muy sensibles y que a la mínima que nos dicen algo saltamos (a veces de malas formas), tengamos o no razón, pero lo peor es que lo acabamos pagando con la gente que nos rodea y nos quiere. Y que a pesar de que estas personas (o persona, depende si es una pareja, familia, amigos…) no tienen culpa de nada y solo intentan que seamos felices, estamos cegados por la tristeza y no vemos lo que hacen por nosotros y si lo vemos no queremos verlo o valorarlo.

Este es uno de los motivos por los que debemos sonreír, porque todas estas personas no se merecen pasarlo mal por nosotros, y se merecen que nosotros sonriamos y les demostremos que son lo más importante que hay y agradezcamos todas y cada una de las pequeñas acciones o palabras que puedan hacer o decir para que desaparezca nuestra triste amargura y seamos felices pase lo que pase.

Pero además es en estos momentos cuando las fuerzas no nos pueden fallar aunque nosotros pensemos que no las tenemos que no vamos a superar la situación, siempre hay algún motivo para sacar las fuerzas necesarias y vencer la tristeza para así pasar de una triste y decaída expresión L a una gran y esplendida sonrisa J :D. Porque ya dicen que al mal tiempo, buena cara. Aunque la vida nos lo ponga difícil nunca, nunca, nunca… debemos rendirnos sino al contrario mostrar nuestra mejor cara y demostrarle a la vida que estamos ahí y que por muchas trabas que nos pueda poner, seguiremos adelante para cumplir nuestros sueños, objetivos o retos. Si le sonreímos al final la vida nos acabara sonriendo el doble porque cuando la vida no te sonríe, sonríele tu a ella, cuando la vida no te de fuerzas, dáselas y anímala tú, porque la vida acabara sonriéndote y recompensando todo tu esfuerzo.

Así que debemos de aprender de los bebes, que por muchas veces que caigan al suelo, por mucho daño que se hagan o por muchos lloros que tengan, ellos se levantan todas y cada una de las veces hasta que aprenden, y acaban sacando a relucir su preciosa sonrisa que se contagia y hace sonreír a cualquiera.

Así que para algo que es gratis en la vida…¡¡ SONRÍE!! No dejes de hacerlo, porque aunque no puedas y sin darte cuenta alguien te lo agradecerá siempre, y con una pequeña sonrisa puedas alegrar o hacer sonreír a alguien. No hay cosa más bonita q el brillo de una sonrisa.

Por eso pase lo que pase ¡SONRÍE! Porque nada brilla más que una sonrisa en la oscuridad! Sonríele a la vida y ella te sonreirá el doble. Y…

 GRITA AL CIELO…
                                                                              ¡¡¡ SOY Y SERÉ FELIZ!!!   

7 de mayo de 2012

Arriba, Adelante; Mira al frente...


Estas palabras hace como un mes que las escribí, a mi me sirvieron, me sirven y me servirán para siempre. Por si alguien tiene un mal momento, espero que le sirvan de animo :). Por cierto, si alguien que le guste la música le encuentra sonido que me lo diga y hacemos tratos jajajaja

Adelante, mira al frente que la vida sigue...
Adelante, mira al frente alégrate de nuevo
Adelante, mira al frente nunca desfallezcas
Adelante, mira al frente no hay dolor insuperable
Adelante, mira al frente que de todo se aprende
Adelante, mira al frente nunca pierdas la alegría
Adelante, mira al frente descubre tu mundo

Animo, que la vida continúa, Animo

Adelante, mira al frente, levántate y sonríe
Adelante, mira al frente, hazlo por los que te quieren
Adelante, mira al frente, que el mundo no se acaba
Adelante, mira al frente no cambies por nada
Adelante, mira al frente no es fácil pero tampoco imposible
Adelante, mira al frente Don't worry and Be happy

Animo que la vida continúa, Animo

Adelante, mira al frente porque la vida te sorprende
Adelante, mira al frente que la vida está llena de sorpresas
Adelante, mira al frente que cuando menos te lo esperas, te alegran la vida

Adelante.... Adelante.... Adelante....

5 de mayo de 2012

¿Errores? Aprender de ellos


En esta vida todos nos equivocamos, más o menos, esto ya depende de cada uno y sobre todo de las circunstancias o situaciones que vivimos en cada día. Yo mismo, no soy perfecto (ni quiero serlo), y me equivoco y mucho (quizás más que nadie) y a lo mejor todos los días pueda cometer errores, pero eso si intento aprender de todos y cada uno de ellos para no caer en los mismos.

Porque en esta vida para aprender hay que caer y equivocarse, pero hay que aprender de cada caída o error. En la caída hay que sacar fuerzas de donde sea y levantarse para seguir afrontando cada uno de los obstáculos del camino e ir aprendiendo de cada caída para no tropezar en la misma piedra, aunque ya se sabe que somos los únicos que tropezamos dos o más veces en la misma piedra, aunque, a veces, quizás vale mucho la pena. Puede ser que nos paren la zancadilla y caigamos o que nosotros mismos tropecemos solos. Pero los errores, aunque depende mucho de las circunstancias o situación en que se produzcan, suelen ser propios y no provocados porque cuando se equivoca uno, no lo hace el vecino (aunque algunos intenten verlo así o que así sea) sino uno mismo.

En esta vida podemos encontrar y cometer muchos errores y de diferentes tipos, algunos porque queremos por las circunstancias que sean y otros porque a lo mejor son inevitables. Algunos de ellos los cometemos por no pararse a pensar muchas veces en que hemos hecho, estamos haciendo o vamos a hacer. Otros porque quizás nos enfrentamos a nuevas situaciones para nosotros y no sabemos cómo hacerles frente, o simplemente tenemos miedo y no sabemos cómo actuar, como reaccionar ante estas situaciones. En otras ocasiones, también podemos cometer errores por no crear conflictos o porque pensamos que estamos actuando bien, o simplemente, porque queremos actuar así. Por eso debemos aprender de los errores, para una vez superados, no volver a caer en los mismos aunque también es verdad que alguna vez sean inevitables por su situación, pero la mayoría tienen solución y aprender de todos ellos es la mejor manera de seguir mejorando en el día a día, de seguir creciendo como personas y saber poco a poco afrontar las nuevas situaciones que nos pone delante la vida y cada vez cometer menos errores o intentar no hacer los mismos.

Además esta vida es tan “puñetera” que muchos errores los cometemos contra las personas que más queremos y nos quieren, aunque es lo más fácil a la vez, ya que son ellas las que nos rodean en el día a día, con las que compartimos nuestro tiempo, nuestros días, y con las que vivimos muchísimas situaciones, muchas de ellas nuevas, y nos acompañan en el camino de la vida. Por este motivo también debemos aprender de los errores, para intentar no volver a dañar a las personas que queremos y que sobre todo nos quieren, porque no hay peor dolor que ver a un ser querido sufrir por nuestros errores.

También podemos cometer otros errores cuando a lo mejor hacemos o no hacemos algo, decimos o no decimos algo, y luego con el paso del tiempo nos damos cuenta que en su momento lo hicimos por algo que valía la pena, pero que a lo mejor no lo volveríamos a hacer por las causas que sean. En cierta medida no son errores porque son decisiones, que en su momento estaban bien, y porque una decisión u otra solo nos afectaba a nosotros mismos pero por otra parte los podemos considerar errores porque quizás no volveríamos a tomar las mismas decisiones porque, o bien, te das cuenta que no valían la pena, o porque lo hubieras hecho de otra forma o simplemente porque te das cuenta que tendrías que haber tomado otras decisiones para no dejar un poco de lado algunas cosas. Lo malo de estos errores es que no te das cuenta de ellos en su momento sino cuando pasa el tiempo o tienes nuevas situaciones o circunstancias en tu vida y reflexionas sobre tus acciones o decisiones tomadas. Pero ante todo de eso se trata de reflexionar y aprender de los errores.

Por todos estos y más motivos, hay que saber aprender de nuestros fallos para así no volver a cometerlos e incluso aprender de los errores de los demás para no cometerlos nosotros porque nunca sabemos qué situación podemos encontrarnos el día de mañana, y si podemos evitar ciertas cosas que mejor manera de hacerlo que aprendiendo día a día de la vida y disfrutando de cada una de las hermosas flores que brillan bajo el sol de cada mañana y florecen a nuestro lado bajo el manto del cariño, la amistad, la confianza, el afecto y los buenos propósitos.

4 de mayo de 2012

Día a Día


El día a día hay que vivirlo, hay que disfrutarlo. Todos los días, por desgracia, no son los mejores por unas circunstancias u otras, siempre hay días mejores y días peores. Pero pase lo que pase debemos demostrar, sobre todo a las personas que nos quieren y queremos, que queremos seguir viviendo más días junto a ellos.

Para demostrarlo no valen simples palabras porque las palabras se las lleva el viento. Aunque la realidad no se puede negar, y muchas veces con unas palabras ya nos sentimos satisfechos porque a lo mejor nos dicen lo que queremos oír en ese momento, o simplemente, porque hay personas que sus palabras tienen el mismo valor que sus hechos, porque aunque pase un huracán, la firmeza de sus palabras permanece intacta, pero esas no son las más abundantes. Para que las palabras tengan el valor necesario muchas veces deben ir acompañadas de hechos porque hablar, decir un pensamiento, o un sentimiento es muy fácil, solo hay que mover unos músculos y emitir sonidos o gesticular (al fin y al cabo lo que queremos decir es lo mismo), pero demostrar esas palabras es lo realmente complicado. ¿ Cuántas veces nos dicen “yo no te fallare”,”estaré siempre que lo necesites”, “…” (Cualquier frase que queramos imaginar desde una amistad a una pareja)? ¿Cuántas veces acaban cumpliéndose o no estas palabras? La respuesta a esta última pregunta también puede tener un factor suerte, como es la suerte que hayamos tenido de encontrar a personas que nos rodeen en el día a día y que sus palabras sean como hechos. Y quizás lo que un día se dice con palabras, al día siguiente puede ser lo contrario. Por eso las palabras hay que acompañarlas con hechos.

Los hechos se quedan grabados, son como verdades y tienen que acompañar a las palabras en el día a día, demostrando las cosas en el día a día y no solo cuando nos interese, o cuando estemos en un apuro y lo necesitemos, o cuando vemos a una persona cabreada y entonces nos damos cuenta, o un sinfín de situaciones. Muchas veces el hecho o detalle más pequeño que nos podamos imaginar es suficiente y vale mucho más de lo que pensamos, porque a menudo los pequeños detalles son los que demuestran lo que nos importan las personas en el día a día, y estos detalles son los que nos hacen grandes.

Y nunca hay que olvidar a todas esas personas que nos rodean en el día a día y que nos los llenan de pequeños detalles, porque esas personas son las que nos hacen felices y las que dan sentido a nuestras vidas, por eso mismo no hay mejor manera de demostrar y agradecer a todas esas personas con palabras acompañadas de hechos que no queremos que dejen nuestro día a día. Aprovechare para agradecer toda esa gente que en algún momento de mi vida ha compartido mi día a día haciéndome muy feliz y que lo siguen haciendo, porque soy lo que soy gracias a todos vosotros.

El valor de los hechos es como el oro, cada vez se revalorizan más y tienen más peso a la hora de demostrar las cosas, como lo que siente uno. Cuanto más valor tienen, nadie podrá contradecirlos porque serán como verdades.

El día a día hay que disfrutarlo porque quizás nos ocurran cosas que nunca más vuelvan a ocurrir (aunque la vida es “larga” y da muchas vueltas), así que no puedo negar la realidad y hay que vivir el día a día con intensidad, con fuerzas y ganas de aprender, disfrutar, gozar… pero yo creo que hay que hacerlo mirando de reojo con un ojo al pasado para aprender de los errores e intentar no caer en los mismos, y con el otro mirando de reojo al futuro para no cometer errores que nos puedan amargar todos esos momentos que vendrán. 

1 de mayo de 2012

No pierdas la cabeza


La vida está llena de muchos momentos, momentos alegres y tristes, dulces (como las palomitas ;) ) y amargos, buenos y malos… momentos muchos de ellos en los que nos guiamos por el corazón, en los que hacemos lo que este nos dicta o lo que sentimos. Momentos en los que estamos cegados por la venda roja del corazón, en la que solo importan los sentimientos, lo demás todo da igual, o mejor dicho, queremos creer que todo lo demás no importa porque no queremos pensar en nada mas que no sea expresado por el corazón.

Pero en esta vida no solo nos guía el corazón, también existe la razón (Facultad de discurrir). La cual, por así decirlo, se encuentra en el centro de control de nuestro ser, la cabeza. La cual a veces desearíamos que no existiera y así no pensar en nada, y hacer solo lo que queramos con el corazón. Pero por suerte o por desgracia, yo más bien creo que por suerte existe.

Los motivos de esta opinión son muy fáciles de entender. Cuando actuamos con el corazón sin pensar, muchas veces no nos paramos a reflexionar sobre las consecuencias que nuestros actos o palabras pueden llegar a generar, y uno puede pensar que si las consecuencias son buenas que mas da… pero yo digo ¿y si no son buenas qué? Porque ojala esta vida solo estuviera llena de momentos increíbles e inolvidables… pero por desgracia esto no es así. Porque al actuar con el corazón quizás estemos seguros de que hacemos lo correcto, que nada malo puede pasar, pero una vez hemos actuado quizás de lo que tan seguros estábamos, se ha convertido en lo contrario, y de nada malo puede pasar cambiemos a ¿habré hecho algo bien? (nos digamos: yo creía que todo era correcto). Por eso mismo antes de actuar, hay que pensar, reflexionar sobre lo que vamos a hacer y intentar pensar en todas las posibilidades que nuestros actos puedan generar y así ante cualquier circunstancia estar preparados para afrontarla y poder responder a cualquier momento o situación.

Se puede pensar que estoy opinando que corazón y razón van por separado, que se contradicen, pero no, no es lo que quiero decir. Lo que quiero decir es que el corazón y la razón (cabeza) tienen que ir juntos, tienen que compenetrarse. Sé que esto es difícil en ciertos momentos, y yo mismo habré actuado con el corazón y sin la cabeza, pero la experiencia me dice que se puede y debe actuar con el corazón pero sin olvidar la razón, porque también nos podemos enfrentar a situaciones en las que nos han herido el corazón (simplemente una persona que apreciemos, un amigo, que nos importe), y en estas situaciones son en las que no hay que perder la cabeza, hay que intentar mantenerla fría para así, aunque estemos heridos, poder reflexionar y pensar sobre lo que haya pasado, o saber qué hacer para afrontar la situación.

Además en muchos momentos en los que uno tiene razón, no se puede perder la cabeza, porque en el momento que lo hagamos quizás nuestros actos sean peores y dejemos de tener la razón, y con la perdida de la razón se pueden perder muchísimas más cosas, empezando por la educación, y ante todo somos personas, y como tales seres racionales, así ya que la vida nos ha regalado la facultad de poder pensar, reflexionar, guiarnos por la razón… aprovechémosla y no la perdamos, y así no nos convertiremos en animales solamente guiados por instinto que cuando son dañados solo se mueven por la rabia y el dolor.

Yo pienso y creo que muchos momentos o situaciones que no son agradables, se pueden resolver parándose a pensar tan solo 5 minutos (o incluso menos), a reflexionar, y después (dependiendo la situación por supuesto) quizás digamos “Si es una tontería”. Por eso opino que ante todo nunca, nunca debemos perder la cabeza, y sobre todo los valores que nos definen como personas, como seres racionales, como son la educación y respeto entre muchos otros.

29 de abril de 2012

El valor del silencio


El silencio como lo define el diccionario significa falta de ruido. Aunque hoy en día es muy difícil encontrar momentos así, y no estoy criticando esto porque sino que sería la vida sin sonidos, y esto incluye las palabras, sería una vida en blanco y negro, como las teles de antes, una vida triste, que aunque el sol estuviera fuera todos los días, no existiría ni el bonito sonido de las olas del mar (no podríamos cerrar los ojos i sentir la brisa del aire acompañada del sonido de las olas rompiendo contra las rocas…), ni el bonito cantar de los pájaros un día de campo, ni muchos otros momentos en los que simples sonidos o palabras alegran cada segundo, cada minuto, cada hora, al fin y al cabo, cada día, y que iluminan de colores nuestras vidas.

Además como he dicho el silencio, incluye que no haya palabras, pero el silencio que yo quiero valorar esto no tendría sentido, no tendría sentido que no hubieran palabras, ya que para que este silencio exista primero deben haber habido palabras, conversaciones y, también muy importante mucha confianza porque es la base de cualquier relación, ya sea de amistad, de amor, o de cualquier otro tipo. Porque del silencio que yo hablo lo definiré en unas simples pero a la vez claras palabras: Uno vale más por lo que calla que por lo que habla.

Estas palabras cobran sentido cuando hay algún tipo de relación de confianza con otras personas, cuando ha habido palabras que no todo el mundo sabe, que a lo mejor solo tú y la otra persona (o circulo de confianza) conocéis. Palabras que pueden tratar de un sinfín de cosas, pero que al fin y al cabo, todas tienen el mismo sentido, y la misma importancia, porque cuando se trata de secretos todos tienen la misma importancia en el sentido de que todos están dichos en la más absoluta confianza de que no serán revelados, porque en el momento que puedan relevarse, perderán sentido como secretos, y seguramente se pierda algo mucho más importante como es la confianza.

Por tanto hay que aprender a valorar la confianza que es algo difícil de conseguir y, sobretodo, de mantener. Y para eso hay que saber cuándo permanecer en silencio porque a veces el silencio puede llegar a valer muchas palabras, porque un silencio puede ser como una imagen, porque ya se dice que a veces vale más una imagen que mil palabras.

Yo he tratado en todo momento de palabras, pero en toda relación del tipo que sea con cualquier persona también hay hechos, acciones, en definitiva, situaciones que deben tratarse como si fuera palabras, secretos, que nunca deben salir del silencio porque se puede llegar a situaciones desagradables. Pero al fin y al cabo uno no debe olvidar que:

Es esclavo de sus palabras y, sobretodo, rey de sus silencios.

28 de abril de 2012

Escucha, Piensa y Aprende


Estas 3 simples palabras, “escuchar, pensar y aprender”, tienen mucho que ver en mi día a día, ya que es lo que intento hacer siempre y así mejorar como persona.

Escuchar, a todos nos gusta que nos escuchen cuando hablamos, que nos escuchen cuando necesitamos desahogarnos, en definitiva, queremos que alguien valore nuestras palabras. Pero al igual que nos gusta que nos escuchen, debemos saber, aprender  y  querer escuchar a los demás porque hay muchas personas que les gusta que les escuchen, que les den consejos, que les ayuden pero estas personas no les gusta escuchar a los demás, no les gusta aprender de los demás, no quieren ayudar a los que seguramente antes les han ayudado escuchándoles a ellos.

Por esto no todo el mundo sabe escuchar, pero como mi experiencia me ha mostrado, si sabes escuchar te valoraran, te mostraran confianza porque saben que tu aportaras tus consejos, una simple opinión que quizás sea la solución.

Pensar, todo el mundo sabe pensar, pero este pensar trata de saber analizar las palabras, de valorar todas y cada una de las palabras que nos dicen ya sea en forma de consejos, en forma de opiniones o, simplemente, en una conversación informal. Nunca ignores lo que escuches antes de pensarlo, porque a lo mejor de la persona y el momento que menos esperas, aprendes algo nuevo. La vida nos sorprende cuando menos lo esperamos, por eso debemos estar atentos siempre y valorar todo lo que tenemos.

Aprender, todo el mundo sabe aprender, algunas veces por obligación y otras por interés personal de querer aprender. Algunas personas tampoco quieren aprender porque no quieren escuchar a los demás, porque solo ellos tienen la razón y lo que digan los demás no les importa ( y no me refiero al típico lo que digan los demás me da igual o que pensaran de mi por algo que haya pasado, que eso es otro tema), y no valoran, ni piensan las opiniones de los demás, incluidos la gente que los quiere. Pero, ¿estas personas quieren mejorar en su vida? ¿Les importa los demás, la gente que les rodea? Mi opinión es que no. Por eso yo considero que si uno tiene ganas de mejorar como persona, de aprender sobre lo que la vida nos regala, de ayudar a sus seres queridos, para eso primero se debe mostrar interés en aprender, escuchando y pensando sobre todas las cosas que oímos, vemos, vivimos,… porque al fin y al cabo la vida está llena de lecciones, y nunca dejamos de vivir nuevas situaciones o experiencias de las cuales aprendemos e intentamos mejorar para así afrontar mejor estas y tantas otras nuevas situaciones porque ya dicen que no te acostaras sin aprender nada nuevo.

Así que no dudes en escuchar las palabras que provengan de quien provengan, porque luego de pensarlas y analizarlas, quizás puedas aprender algo, o simplemente conocer a una persona, porque al fin y al cabo, escuchando se aprende y cuando uno aprende, mejora que es una de las cosas de las que trata la vida: Aprender y mejorar día a día. 

Para acabar quería destacar algo: igual que digo palabras, pueden ser acciones, experiencias, etc… porque de todo se aprende.

26 de abril de 2012

Volviendo a las andadas

Como dice el titulo, he vuelto a reanimar este blog que tenia abandonado desde hace 19 meses aproximadamente.


Las dos primeras entradas tratan del 22 de julio y 15 de agosto, ambas de 2010. son las dos entradas que he querido conservar de entonces, ya que son entradas que me encantan.


Por ultimo, se puede observar que las restantes entradas, son recientes, las publique en tuenti y ahora como reabro el blog, lo he actualizado añadiendo estas nuevas entradas.


Así que yo os animo a leerlas, son escritas de mi mas modestia opinión, sobre reflexiones, pensamientos y sentimientos que yo tengo, ya que lo que aquí pongo al fin y al cabo es lo que siempre he pensado y que he ido mejorando y espero mejorar a lo largo de los años. Solo deseo que os guste, y si a alguien le sirven como consejos o se siente identificado o lo que sea, yo con eso me doy por mas que satisfecho. Espero vuestros comentarios y opiniones sobre mis reflexiones ya que  no tengo porque tener toda la razón ni estar en lo cierto, pero de eso se trata de aprender y mejorar de los demás :)


Hoy no publicare nueva entrada, ya que me gustaría recordar mis dos primeras entradas, así que si os animáis, estáis invitados a leerlas, reflexionar y opinar.


Deseo que disfrutéis de la lectura y muchas gracias por las visitas, estáis y seréis todos bienvenidos :D,


Saludos.






25 de abril de 2012

Escucha a los amigos


Este pensamiento lo empezare planteándome una pregunta, ¿Qué son los amigos? El porqué de esta pregunta es fácil, porque gente conocida a los que muchas veces llamamos amigos hay muchos, pero estas personas igual que un día o muchos días te muestren una sonrisa, hagan como que escuchan, te saluden como si los conocieras de toda la vida, al final, cuando realmente los necesites, cuando necesites su ayuda, consejo, una simple sonrisa, o unas pequeñas palabras bonitas, de apoyo, en ese momento te darás cuenta de que son eso conocidos porque te darán la espalda, te negaran todo lo que necesitas en esos momentos o simplemente te ignoraran porque te dirán que no los marees.

Lo fácil es estar en los buenos momentos pero realmente digno de llamarse amigo, el que es amigo de verdad, lo demuestra en los malos momentos, en los que sabes que pase lo que pase NUNCA te fallara y que darían por esa amistad todo lo que hiciera falta y mas, porque amistades verdaderas por desgracia no se encuentran fácilmente.

Además un amigo tiene toda la confianza del mundo, aparte que se la merece porque lo habrá demostrado, y sabe solo con una simple mirada como podemos estar en ese momento, y sobre todo sabe qué hacer para que con unas simples palabras, una sola mirada, un solo gesto o una simple caricia (abrazo o beso) transformemos la amargura de los malos momentos, en dulce felicidad, felicidad de saber que amigos que hagan eso se merecen lo mejor de la vida y cualquier cosa que esté a nuestro alcance.

Por todo esto y más, debemos escuchar a los amigos, porque cuando ellos nos dicen o cuentan algo seguramente sea por nuestro bien. Porque aunque nos cuenten algo que no queramos escuchar porque quizás no sea agradable o nos pueda afectar mucho, si lo hacen es porque nos quieren y no desean que nos pase nada malo. Porque aunque todo lo que hagan o digan haga daño, primero hay que escuchar sus palabras, luego pensar en ellas, nunca ignorar sus palabras, y luego de pensar es cuando nos demos cuenta que quizás aunque duela tienen toda la razón del mundo, que aunque no queramos oír esas palabras es la cruda realidad, y cuando antes afrontemos esa realidad, antes se solucionaran las cosas, antes alcanzaremos la felicidad. Eso si, no sin antes dar las gracias a esos verdaderos amigos.

Así que aprovechare estas palabras para dar las GRACIAS a mis amigos, y que por muchas veces que diga GRACIAS sé que no será suficiente para agradecerles todo lo que han hecho y harán por mí, pero saben que a mí me tienen en cualquier momento que lo puedan necesitar, porque no tengo mejor satisfacción en la vida que ayudar a la gente que quiero, y que daría todo lo que fuera por ellos.

Valora todo lo que tus amigos te digan y luego decide, pero no ignores sus palabras o acciones porque a veces cuando la verdad la tenemos delante no queremos verla, y no hay mayor ciego que el que no quiere ver. Así que abre los ojos y disfruta de los amigos.

Los amigos es el bien de más valor que uno puede tener en la vida.

24 de abril de 2012

Los problemas de cara


Aunque el titulo sea un poco confuso y alguien pueda creer que hablo de los problemas de la cara, ni mucho menos me refiero a eso porque entonces tampoco sería el más indicado para hablar de ello jajaja Después de este pequeño momento en que si alguien ha sonreído me doy por más que satisfecho, voy a centrarme en lo que realmente quiero expresar que no es más que: Los problemas hay que afrontarlos de cara.

En mi modesta y humilde opinión pienso que a los problemas nunca hay que darles la espalda, siempre hay que afrontarlos de cara por mucho dolor, daño o un sinfín de emociones que puedan crear. Porque lo fácil y bonito es si algo no nos gusta pues le damos la espalda, lo dejamos de lado y hacemos como que no ha pasado nada, pero no hay mayor error que dar la espalda a algo, porque si lo hacemos con los problemas, podemos llegar a hacerlo con gente a la que realmente podemos querer. La solución fácil, rápida, no es siempre la mejor, ya que cuando algo nos afecta cuando antes se solucione mejor, cuando antes lo arreglemos antes podremos estar bien, cuando antes estemos bien antes estaremos felices y si antes estamos felices quizás la gente que nos rodea solo por vernos así, consigamos verles sonreír.

Cuando damos la espalda a los problemas, solo deseamos que se olvide, como si realmente no hubiera pasado nada, y quizás pensemos… es una tontería, ya se olvidara el asunto y como si nada… pero porque no pensamos que ese ya se olvidara puede ser al revés y que cada vez el problema vaya a mas, las consecuencias sean peores porque mientras le damos la espalda no nos damos cuenta, hasta que explota y nos golpea y quizás ese momento ya sea tarde para intentar buscar una solución o simplemente para hablarlo, porque no lo que puedas hacer hoy no lo dejes para mañana, lo que puedas solucionar en un momento no lo dejes para cuando tengas ganas.

Todo lo que nos dicen en esta vida no son palabras agradables, quizás lo que nos cuenten no queramos escucharlo y preferimos ignorar, pero yo pienso que la ignorancia y la indiferencia, cuando alguien que te quiere te dice o cuenta algo, no debe existir. Porque sabemos que esas palabras pueden ser dolorosas, pero el dolor puede ser temporal si cogemos el toro por los cuernos, vamos de cara y afrontamos la realidad. Porque ya dicen que la verdad ofende, pero cuando esa verdad nos la cuenta alguien que nos rodea siempre debemos escuchar y luego decidir lo que creamos más conveniente, como decía un gran filosofo: “Pienso, luego existo”. Pensar es bueno, ya que si hacemos o decimos las cosas sin pensar… las consecuencias quizás puedan ser más dolorosas, más dañinas, o incluso lo más indeseables que nos podamos imaginar, y todo por no dedicar un poco más de tiempo a escuchar, pensar, analizar y intentar solucionar todo lo que nos pueda afectar. Porque de lo que a lo mejor era un simple granito de arena (una tontería) se puede transformar en una gran montaña (una discusión indeseada, una pelea, un distanciamiento, todo lo q nos podamos imaginar).

La vida está llena de problemas, si a todos les van dando la espalda, se van acumulando hasta que llegue el momento que no se podrá evitar ninguno porque a lo mejor te golpean todos de golpe, y de algo que tenia fácil solución en su momento se convierten todos en grandes problemas y muchos seguramente sin solución y los que la tengan, pueden tener soluciones o consecuencias indeseadas.

Así que mi opinión, como consejo, es afrontar de cara cada una de las trabas o problemas que nos plantea la vida, y cada golpe que esta nos de lo asumamos y afrontemos con la mayor de nuestras fuerzas, porque por suerte o por desgracia solo tenemos una vida, y aunque los problema no siempre puedan solucionarse, al menos quede el consuelo y la satisfacción de haber hecho todo lo que estaba en nuestras manos.

22 de abril de 2012

Mentiras (continuación)


Siguiendo tema que deje en mi anterior entrada… siguiendo mi reflexión acerca la mentira, voy a profundizar un poco más sobre lo que pienso aplicado a algunos casos.

Cuando uno miente no miente a nadie, solo y exclusivamente se miente así mismo.

Porque al final siempre se sabe la verdad, y cuanto más tiempo dura la mentira, peor son las consecuencias y peor es el daño que se pueda hacer. Vivir engañado es lo peor que uno puede hacer porque cuando quiere uno arreglarlo quizás sea tarde o quizás la situación sea irreparable.

Siempre hay que ir de cara, afrontar los problemas de cara y decir las verdades sea lo que sea, porque una verdad puede doler pero puede ser reparada, comprendida o perdonada. Sin embargo, una mentira quizás en un principio no duela o si, pero al final acabara doliendo mas que nada y quizás no tenga solución ni perdón. Pero afrontar los problemas en otro momento escribiré lo que pienso…

Además aunque muchas veces lo hagamos por no dañar a las personas que queremos, que mentimos para que no se sientan mal o porque sabemos que la verdad hará daño, en mi opinión los verdaderos amigos, si quieres a la otra persona, un amigo dirá la verdad por mucho que duela, porque ver como un amigo que vive bajo la mentira, sabiendo que acabara sufriendo mas y incluso las consecuencias pueden ser irreparables es peor que decir la verdad y que el dolor sea solo temporal, ya que al final esa persona acabara valorando que vas con la verdad por delante, que lo haces por ella, porque la quieres y no quieres ningún mal para ella.

No voy a dudar que no hay peor cosa que ver sufrir a un amigo por algo que hayas dicho aunque no seas responsable de nada, pero es peor ver como ese amigo vive engañado bajo la mentira, pero con la verdad todo se puede arreglar, sin embargo con una mentira por delante el sufrimiento acabara siendo peor, y quizás si sabe antes tenga solución, porque cuanto más tiempo pase el golpe será más duro de asimilar.

Por eso cuando alguien que te quiere te dice algo aunque no quieras escucharlo porque te puede hacer daño, hay que escucharlo y valorar lo que te dice porque alguien que te quiere solo querrá el bien para ti, porque lo bonito es que te regalen los oídos pero por desgracia en esta vida no es todo de luz y de colores, y cuanto antes afronten las cosas antes se solucionan los problemas y antes se siente uno mejor, y puede lograr la felicidad.

Por tanto si quieres a una persona, sea un familiar, un amigo, tu pareja, al fin y al cabo alguien al que solo le deseas lo mejor de la vida, por mucho que pueda doler NO MIENTAS, con la verdad por delante se puede llegar hasta el precioso e inmenso cielo azul que nos regala cada día la vida, se puede llegar hasta las estrellas que iluminan la noche que cubre todos los sentimientos que uno tiene hacia sus seres más queridos, pero con la mentira solo lograremos vivir bajo un cielo gris, negro como un día tormentoso, y lleno de desilusiones, falsedades, imposible de alcanzar tu felicidad y sobretodo de las personas más queridas por uno mismo.

No soy la persona perfecta del mundo, también habré mentido de una forma u otra en esta vida, pero también aseguro que nunca habrá sido para hacer daño porque no hay peor cosa que me pueda hacer daño que ver a alguien que quiero mal, y más aun si el responsable soy yo. Por eso aprovechare para pedir perdón si alguna vez lo hice, intento mejorar en mi día a día.

Mentiras


Retomando pensamientos, volviendo a escribir cosas que pienso y desde mi punto de vista las veo así.


De las cosas que más odio en esta vida es la mentira. Yo distingo entre diferentes tipos de mentiras.


Por ejemplo, las mentiras piadosas, mentiras que se pueden decir para no dañar a alguien, o mentiras que se dicen porque se oculta una sorpresa, un simple regalo o sacar una pequeña pero gran sonrisa, alegría a alguien. Al fin y al cabo no dejan de ser mentiras pero la persona por la que se miente sabe que no hay mal, que se hace por una buena causa o fin, y que solo se dice por bien, NUNCA para mal.


También distingo la falta de verdad, contar las cosas a medias o contarlas de manera que se falta a la verdad, al fin y al cabo sino se dice la verdad, se está mintiendo. O contar la realidad a medias, se cuenta cierta verdad pero también se oculta cierta verdad, por tanto cierta mentira hay en ello. En estos casos, pueden ser simples mentiras que tampoco afectan a la realidad, que al fin y al cabo no cambian las cosas, que no se pierde sinceridad en cuanto a persona (aunque en las palabras falte algo de sinceridad). Aunque también se puede hacer daño, mucho o poco esto ya depende de lo que sea o la importancia que se le de, pero como casi todas las mentiras de esta vida, daño acaban haciendo.


Por último, reflexionare por lo peor, la pura y dura mentira, la mentira que no tiene nada de bueno, que solo logra hacer daño, dolor… y que nada bueno puede traer, bueno quizás una sola cosa buena… que las persona o personas a las que se les ha mentido se den cuenta de cosas que quizás desconozcan de las personas que han mentido. Esta mentira nunca será buena, ahora quizás alguien diga cómo que no… yo he hecho tal y ha sido por bien, ha traído cosas buenas, etc.…. Pero lo que en un principio todo es color, luz, felicidad, al final puede convertirse en todo lo contrario oscuridad, peleas, falsedad, discusiones, y un sinfín de daños y cosas innecesarias. Innecesarias mentiras que pueden ahorrar muchos momentos que quizás no sean agradables, momentos que nadie quiere vivir, momentos que es mejor olvidar.


Esto es una primera parte, pero la dejare aquí para no hacerla tan extensa, seguramente me deje cosas por expresar pero más adelante las editare, aunque mis pensamientos más profundos no son estos, ya que al fin y al cabo son cosas generales, pero continuare expresando mis pensamientos sobre este tema, ya que al fin y al cabo:


La mentira acaba siendo como finos cuchillos que no se frenan ante ninguna barrera de la vida y que acaban llegando a lugares que otras acciones o palabras para imposible que lleguen.